jueves, 2 de abril de 2009

VOLVIERON LAS FABULAS: EL PRIMER CAMPAMENTO A CHASCOMUS !!!


Corría el año 2002. El presidente de nuestro querido país era Eduardo Duhalde, que había derrocado tiempo antes a Fernando De La Rua en el primer golpe de estado de la Nación en el que no hubo participación militar. Los argentinos nos estábamos "acostumbrando" a un dólar superior a los $3 y el "made in Argentina" sonaba nuevamente en la clase media nacional. Pero esto no era impedimento para una cofradía que incipiente en su nueva formación, buscaba nuevos destinos para expandir su influencia nochera y viril, ya que nuestra ciudad de las diagonales le empezaba a quedar chica. Así fue que se empezó a planear la "expedición" Chascomús. El plán era sencillo: Pasar un fin de semana largo (por el día de la raza, 12 de octubre) en la vecina localidad, disfrutando del sol, la laguna, el alcohol en cantidades asombrosas y la maravillosa capacidad de Orien Moebius Deus para pescar peces y demás animales acuáticos. La mesa estaba servida.
Como de costumbre, la casa de Tony Delapradera era el lugar donde se planeaba la empresa, se calculaba el presupuesto y, de paso, se bebía y se jugaba T.E.G. para pasar el rato. Después de muchas idas y vueltas, confirmaciones y decepciones, la formación para la expedición Chascomús estaba definida: Ernejo Maranguino, Tony Delapradera, Alex Sacerdote, Orien Moebius Deus, los hermanos Sting (federrico y Sebástian) y Patrick Antonieta. Solo quedaban afuera Gáston Elmaní (miembro más novato de La Cofradía que aportó su enorme e indescifrable carpa para que sirva de morada al Clán) y Matius Montanari, que en ese momento era poco menos que una planta. Los vehículos de Maranguino, Sting y el propio Deus serían los medios de transporte para un grupo que se salía de la vaina por iniciar la aventura.
La autovía 2 fue un caos. Mucho más después de que Deus posó las ruedas del inefable "duna" en la misma. Frenadas constantes, virajes suicidas y casi un choque de proporciones gigantes fueron producidos por una persona que no estaba en sus cabales. Encima nos guió hacia la "Laguna del Burro" (lugar de 25 metros cuadrados, donde seguramente hubieramos sido violados en la noche por los habitantes del lugar). A pesar de todo, el grupo ya había realizado su primera parada técnica en un supermercado para comprar cajones de cerveza y seguir camino a destino. Finalmente, el camping de Carucha Corti, ex A.C.A., sería el elegido.
Armar la carpa del Gasty fue más dificil que encontrar una chica "pasable" en ese camping. Tanto es así que los primeros en arribar y encargados de esperar a los demas cofrades con las cosas listas (Ernejo, Orien, Patrick y Tony), desistieron de la idea y decidieron empezar a beber mientras disfrutaban de un hermoso día soleado y unos fútbol - tenis. Para las seis de la tarde y cuando empezaba a caer el sol, el grado de alcohol de La Banda era tal que no distinguía entre el bien y el mal, llegando a protagonizar verdaderos papelones como las recordadas "palizas" de Sacerdote en el ajedrez propinadas a un endeble Deus que, no satisfecho con la primera, pidió revancha y fue nuevamente humillado por un Alecura que a esa altura se parecía al mismísimo Kafelnikov. Todo esto con la carpa aún sin armar.
Frases para la posteridad como "que no van a picar, a mi me picaron siete" o "Tulio no me acetó la apuesta" decoran una aventura épica de enormes dimensiones. Mucho más si Orien, que fue equipado para la pesca como un discípulo de Jacques Costeau, tuvo menos pique que el arroyo "La Fama" defraudando a todos los cofrades y a su padre (que si se hubiera enterado lo habría desheredaro). Los que si pescaron fueron Tony y Antonieta, consiguiendo 5 bagres del conurbano que sirvieron para pasar el rato y amenizar la noche alcohólica. Queda para el recuerdo la terrible negativa recibida por Sebástian Sting de mano de un bagre, la "pico de Loro" que se comió Sacerdote y el repentino amor de Orien Moebius por una de las chicas que "lo volvía loco".
Párrafo aparte para el regreso del grupo que, para ahorrarse dos pesos per cápita, decidió escaparse del camping saltando una pared en el medio de la torrencial lluvia que los despidió. Alex Sacerdote salió mal herido en la misión e, imposibilitado de un brazo, corrió por el fango huyendo de los guardias del lugar que, nunca llegaron.
Y para los que nos siguen todas las semanas, todo lo demás es leyenda...
Abrazo de gol.

PD: apoteósicos canelones se comieron Patrick y Tony en la casa de Deus al regresar de Chascomús.

EL SEÑOR X

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Hermosa historia. Ahora yo me pregunto: que hay de cierto de que Orien Deus se quizo apretar a un bagre y la mina lo sacó carpiendo???

Alex Sacerdote dijo...

recuerdo que luego de la negativa de la pico de loco al lepra sting, antonieta se encerroce en un carpa con la boletera del tren fantasma alias carucha muller muy enamorado con intension de mojar el biscocho y pero creo que no le toco ni una tetita,(cosa imposible porque venia tabla-tabla, quisiera que el que tenga bien fresco cuente cuando orien se comio a he-man que creo que lo pasaron por alto. saluda atte.

Pitu dijo...

Muy buena historia. Al leer esta fabula se me vienen muchos recuerdos lindos a la mente.
La verdad que tendriamos que volver a hacer esas expediciones.
Abrazos.

Tony dijo...

La verdad que estas cosas son dignas de repetirse... Las veces que lo hicimos la pasamos de primera y trajimos millones de anecdotas... A reflexionar... ¿Nueva expedicion???? CHAN